ROVINJ - Croacia

Hoy Juan F. Morillo nos lleva a callejear por Rovinj,  ciudad pequeña, con poco más de 14.000 habitantes y ambiente de pueblo pesquero tradicional croata.

Descripción

 Rovinj es mencionada por primera vez en el s.VIII como Ruvignium, Ruvigno o Ruignio. Sin embargo, es muy probable que ya existiera como poblado durante el Imperio Romano e incluso antes, en tiempos de las tribus ilirias. Por entonces Rovinj estaba ubicada en una isla. Y así permanecería hasta 1763, año en que fue unida al continente al rellenar el canal que los separaba.

 La historia de Rovinj es muy parecida a la de la mayoría de poblaciones de Istria. Esta región fue conquistada y reconquistada a lo largo de su historia por un gran número de pueblos, reinos e imperios. La República de Venecia dejó una gran huella en la zona, pues gobernó allí entre 1283 y 1797. Rovinj perteneció más tarde al Imperio Austríaco, al Reino de Italia y, tras la Segunda Guerra Mundial, a Yugoslavia. Con la independencia de Croacia en 1991, Rovinj cambió de manos por última vez.

Juan me comenta que a pesar de que visitaron la ciudad en temporada alta, no encontraron por sus calles, demasiados turistas. Me dice: "La ciudad no tiene muchos atractivos turísticos concretos, pero su casco antiguo, de aspecto medieval, es un monumento en sí mismo. Dedicando 2 o 3 horas a pasear tranquilamente, se puede dar por realizada la visita más básica".

Callejeando

La zona del casco antiguo (Stari Grad) se extiende desde Ulica Carera hasta la Basílica de Santa Eufemia, en lo más alto de la pequeña colina que constituye la zona vieja (lo que en su día debió ser la isla donde se asentaba la población). Desde la concurrida zona peatonal de Ulica Carera, donde abundan los restaurantes y tiendas de recuerdos, podemos acercarnos a varias plazas muy coquetas, y por cualquiera de las callejuelas que se adentran hacia el casco antiguo podremos empezar la subida hacia la Basílica de Santa Eufemia

Basílica de Santa Eufemia, patrona de Rovinj, construida en el siglo XVIII, aunque su fachada ha sido restaurada a finales del siglo pasado

Su campanario mide 60 metros y está decorado con una estatua de Santa Eugenia que gira alrededor de su eje cuando soplan fuertes vientos.

 Lo más notable de esta iglesia barroca, construida en 1736, es su gran torre que imita al Campanile de San Marcos en Venecia. Se puede subir libremente pero al parecer las destartaladas escaleras de madera no son aptas para todos. En el interior (gratis), hay un sarcófago con las reliquias de Santa Eufemia y varias pinturas góticas. Lo mejor de llegar hasta allí son las fantásticas vistas sobre el Adriático y las islitas cercanas. Todo un placer para la vista.

Souvenirs 

Con la iglesia de Santa Eufremia dominando todo el núcleo antiguo

Original numeración

 Hay multitud de rinconcitos adorables, callejuelas, tiendecitas con artesanías o pequeñas galerías de arte que pueden atraer nuestra atención. Después de callejear se llega a Basílica de Santa Eufemia. 

Para regresar al centro sugerimos encontrar una ruta alternativa y despedirse acercándose al final del muelle para obtener una magnífica vista de todo el conjunto, y contemplar el animado puerto de Rovinj, lleno de barquitas de pescadores y restaurantes.

Entrada a una vivienda